Deliet
El amor desbordado, cargado de sensualidad, es placer, es erotismo, es el contraste entre lo platónico y lo idílico. Platón afirma que Eros fue concebido por Poros (la abundancia) y Penia (la pobreza), de ahí sus contrastes y sus extremos. A veces cargado de culpa, otras de obsesión. Entonces, hablar de un “antieros” es abandonar esos extremos para encontrarse en la ausencia del amor y dejar paso sólo a lo carnal.
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